miércoles, 15 de agosto de 2012

Mi cuerpo está suspendido.
Mis brazos están suspendidos.
Mis ojos están suspendidos.
No sentir la gravedad.
Cada milimetro de mí flota en tu letargo eterno...
Y ni siquiera acá puedo encontrarte.
Todo se vuelve un cuarto oscuro,
gira y cambia de color.
Caigo, giro, me levanto, bailo.
Me vuelvo a caer, vuelvo a girar, sigo bailando.
Sigo flotando.
Pero todo pesa igual.